El desarrollo de la tecnología comienza a provocar cambios significativos en los modelos de enseñanza. En las universidades, por ejemplo, las tradicionales bibliotecas atestadas de ejemplares impresos están dando paso a los libros digitales (e-books).

Es el caso del Departamento de Ingeniería de la Universidad de Texas en San Antonio (UTSA) donde los textos digitales se pueden descargar desde cualquier terminal a los computadores portátiles de los estudiantes.

En septiembre la UTSA abrió la primera biblioteca sin libros que funciona en un campus universitario de Estados Unidos

Tiene capacidad para 80 personas y alberga 425 mil libros digitales y 18 mil suscripciones a revistas digitales, informa el reportero de la BBC, Kabir Chibber.

Cambio drástico

"Con mejores herramientas de búsqueda y una creciente disponibilidad de contenidos digitales, encontrar información se convirtió en algo más sencillo", dijo Krisellen Maloney, decana de las bibliotecas de la UTSA.

Otros centros de estudio siguen la misma tendencia.

En 2000, la Universidad del Estado de Kansas abrió una biblioteca electrónica, pero mantuvo algunos libros de referencia. A principios de este año, la Universidad de Stanford quitó todos los ejemplares, excepto 10 mil volúmenes impresos, de su biblioteca de Ingeniería.

Con estos nuevos sistemas, el personal de la biblioteca tiene ahora más tiempo para ayudar a los estudiantes con sus consultas en lugar de estar sacando libros de las estanterías.

Pero las editoriales académicas han ralentizado las publicaciones digitales y por una sencilla razón: los textos académicos representan un valor unos US$8 mil millones al año en EE.UU.

Los editores y los libreros no están dispuestos a matar a la gallina de los huevos de oro.

"Los modelos de negocios están cambiando en el mundo editorial pero en algunos casos sigue existiendo una tendencia hacia la impresión", dice Maloney.

"El modelo (tradicional) todavía subsiste porque los editores se están resistiendo a encontrar una alternativa", dice David Prescott, jefe de ventas de Blackwell's una de las librerías académicas más grandes del Reino Unido

Los libros digitales pueden ser compartidos y copiados infinidad de veces; a diferencia de tener 30 libros para 30 estudiantes.

VER ARTICULO COMPLETO